jueves, 19 de enero de 2012

Con El Palillo En La Boca...





El tercer personaje:

   "Después entra a servir a un hidalgo arruinado cuyo único tesoro son sus recuerdos de hidalguía y de dignidad; Lazarillo simpatiza con él, ya que aunque no tiene nada que darle, por lo menos le trata bien, si bien recurre a esa simpatía que despierta para conseguir que le dé parte de los mendrugos que consigue el muchacho al pedir limosna, ya que él no posee la dignidad de la hidalguía" 
                                      (Lazarillo de Tormes. Fte: wikipedia)










Con la bufanda fina al cuello, y mirando hacía su pareja, el hidalgo se jacta de repetir alguna absurdez que el noble ha dicho..y que él ensalzará como si fuera la cosa más ácida e inteligente que hubiera oído jamás (buscando la aprobaciòn y la sonrisa de compadreo del gobernante de turno). Así, va poco a poco entresacando el tema de "la partida" dando a entender a su pareja que deberían de cenar en casa...y haciendo chistes leves sobre sus comentarios. 


Nota: para ser un buen hidalgo, no basta con "alternar y mercadear" entre los bares y cantinas del reino; una cosa muy importante es que no se note tu presencia.